Conflictos familiares entre padres e hijos jóvenes

Resumen

Los cambios asociados a la adolescencia acarrean tensiones y problemas que, con frecuencia, modifican la feliz convivencia que hasta ese momento gozaba la familia. Sin embargo, se da por sentado que cuando los hijos llegan a la juventud y estudian en la universidad o han empezado a trabajar, los conflictos familiares se han apaciguado. No obstante, estudios actuales revelan que esta impresión no se corresponde muchas veces a la realidad. Con los hijos jóvenes persisten frecuentemente las discusiones. En este artículo se ahonda en las familias en que los jóvenes conviven con sus padres y, sobre todo, en los factores que propician un buen clima familiar. Como se revela a lo largo de la investigación, no es el mero paso del tiempo lo que condiciona la resolución de las tensiones familiares, sino factores como la cercanía afectiva, la flexibilidad familiar y las habilidades comunicacionales.