Iglesia católica y exterminio hebreo

Abstract

Entre los gestos simbólicos apoyados por el papa, para el cambio de siglo y de milenio, se encuentra la evaluación de la historia pasada, en especial de aquellos acontecimientos que han influido de forma decisiva, a lo largo del siglo XX. Uno de los más llamativos ha sido indudablemente el genocidio del bueblo judío, ejecutado por las autoridades nazis en grandes sectores de Europa, después de cuidadosa programación. Muchos de los dirigentes nacionalistas que intervinieron directamente en tales crímenes eran católicos bautizados. Lo más grave, sin embargo, es que aquella ideología antisemita que les animaba tenía un claro precedente en el antijudaísmo, arraigado secularmente en la doctrina, la predicación, la catequesis y la conducta cristianas. Tras años de preparación y precedida de las peticiones de perdón de algunos episcopados europeos, como el alemán, el francés y el polaco, la Comisión pontificia para las relaciones religiosas con el hebraísmo acaba de publicar un documento de recuerdo de aquel exterminio, que ha suscitado posturas encontradas en la opinión pública. Ésta es la razón por la que nuestra revista estudia semejante texto, desde una postura de discernimiento crítico.